Ley del Limón

La Ley del Limón de California es una ley que protege al consumidor. Si bien abarca una gama amplia de productos, la mayoría de las personas que la usan son compradores de vehículos defectuosos. Dicha ley establece, básicamente, que cuando un fabricante no está en condiciones de reparar un defecto que afecta sustancialmente el uso, valor o la seguridad del vehículo después de haberlo intentado una cantidad razonable de veces, tiene que readquirir o remplazar el vehículo.

Lo primero que tiene que hacer es presentar su vehículo para que sea reparado. Si el fabricante o su concesionario no pueden reparar el defecto después de haberlo intentado una cantidad razonable de veces, su vehículo probablemente reúna los requisitos para que el fabricante lo readquiera bajo la Ley del Limón de California.

Si bien no existe un número mágico, si al cabo de tres o cuatro intentos su vehículo no fue reparado, podría reunir los requisitos bajo la Ley del Limón de California. Si el defecto está relacionado con la seguridad, su vehículo podría reunir dichos requisitos con tan solo dos intentos de reparación.

La Ley del Limón de California se aplica a defectos “sustanciales”. Cualquier defecto que afecte la manejabilidad de un vehículo – como por ejemplo el motor o la transmisión – se consideraría un defecto sustancial. Sin embargo, los vehículos vienen equipados con diversas funcionalidades que podrían ser defectuosas y crear un impedimento sustancia. Por ejemplo, los sistemas de aire acondicionado y calefacción, la navegación, las ventanillas, techos convertibles, luces de advertencia, Bluetooth, radio y muchos más. Resumiendo se puede decir que cualquier característica del vehículo que no funcione podría dar lugar a una situación que lo afecta de manera sustancial.

Si la garantía del fabricante todavía estaba vigente en el momento de la compra, entonces la Ley del Limón de California se puede aplicar a un vehículo usado.

Sí. La Ley del Limón de California se aplica tanto a vehículos comprados como arrendados.

Si su vehículo reúne los requisitos bajo la Ley del Limón de California puede recibir un reembolso. A esto a veces lo llaman “readquisición” del vehículo. El reembolso consiste en todos los pagos que se hicieron como parte de la compra o el arrendamiento del vehículo, incluido el pago inicial y todas las cuotas mensuales. Si se está financiando el vehículo el fabricante también paga el saldo del préstamo. Ud. también tiene derecho a cobrar todos los gastos relacionados con este tema que pagó de su propio bolsillo, tales como arrendamientos, servicios de grúa, gastos de reparación y registración del vehículo en el DMV.

Si su vehículo reúne los requisitos bajo la Ley del Limón de California el fabricante tiene la obligación de pagar sus honorarios de abogado. Nuestro bufete jurídico no exige que Ud. realice ningún pago inicial ni pague por los gastos. Si no se recupera una cantidad de dinero para Ud., no tendrá la responsabilidad de pagar honorarios de abogado.